Extender la mantequilla por el pan cuando está dura es un suplicio, hay que reconocerlo. El pan no aguanta la presión, cede, se forman cúmulos de mantequilla en los lugares centrales mientras que los periféricos se quedan al descubierto, convirtiéndose en parte prescindible del desayuno.
La verdad, empezar cada día con esta batalla es muy tedioso.
Para muchos la solución está en añadir también mermelada, que es mucho más manejable y cubre los huecos, pero eso no solventa el problema; tan sólo lo disimula. Y empezar el día mintiendo al pan, mintiendo a la mantequilla y mintiendo a tu capacidad resolutiva no puede ser bueno.
Aquí hay algo que va a cambiar nuestras vidas: un cuchillo que se calienta a 41.8 grados centígrados. Lo sé, no es muy impresionante. Pero es el terror de los bloques de mantequilla. En cuanto lo ven venir se hacen pequeños y sumisos y se separan antes siquiera de tocarlos. El Toastie Knife de Warburtons puede ser perfectamente el precursor de los sables de luz en su vertiente casera y práctica. Que no todo va a ser cortar manos.
Fuente: Nopuedocreer
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